Alborache está situado en la margen derecha del río Buñol, sobre la cima de un pequeño cerro al que circundan dos barrancos. Limita con Buñol (al norte), Godelleta (al noreste), Turís (al este), Dos Aguas (al sur), Macastre (al oeste) y Yátova (al noroeste). La superficie está quebrada por numerosos barrancos y torrentes. La parte de mayor altitud es una estrecha y alargada faja de terreno que llega hasta las estribaciones de la Sierra de Dos Aguas. Interés turístico
La Ruta de los Molinos arranca en el Charco Azul, un manantial de aguas cristalinas que creo una pequeña corriente que, tras atravesar una chopera, desemboca en el río Buñol.
Este sendero temático recorre las antiguas edificaciones que aprovechaban la fuerza del agua para diferentes usos desde el S.XVIII hasta principios del S. XX.
Molinos harineros primero, «fábricas de luz» después, algunos de ellos se han perdido para siempre aunque otros perviven transformados en residencias y casas rurales.
Pero sobre todo perviven las infraestructuras que se construyeron para dotarlos de utilidad: azudes, canalizaciones, compuertas, … ahora ya integradas en el paisaje fluvial de este rincón de Alborache.
La Ruta de los Molinos es fácilmente transitable para todo tipo de personas a pie, en bicicleta o incluso a caballo.
Además de acondicionar el recorrido cuenta con algunos paneles que informan sobre los antiguos molinos que encontramos a nuestro paso y sobre algunas de las construcciones realizadas para el aprovechamiento del agua.
Gastronomía mediterránea de interior: arroz al horno, gazpachos de pastor, paella valenciana, mojete, carnes asadas a la brasa con ajoaceite y, por supuesto, excelentes vinos de la tierra.
La Ruta Urbana nos permite un agradable recorrido por las calles de Alborache, un paseo en el que descubrir la Casa del Milagro, la Iglesia Santiago Apóstol, la Fuente de la Agricultura, el Parque San Jaime, la Plaza de España o el Torreón.
Desde algunos de estos puntos podremos enlazar con los senderos de corto recorrido.
La Ruta de los Molinos arranca en el Charco Azul, un manantial de aguas cristalinas que creo una pequeña corriente que, tras atravesar una chopera, desemboca en el río Buñol.
Este sendero temático recorre las antiguas edificaciones que aprovechaban la fuerza del agua para diferentes usos desde el S.XVIII hasta principios del S. XX.
Molinos harineros primero, «fábricas de luz» después, algunos de ellos se han perdido para siempre aunque otros perviven transformados en residencias y casas rurales.
Pero sobre todo perviven las infraestructuras que se construyeron para dotarlos de utilidad: azudes, canalizaciones, compuertas, … ahora ya integradas en el paisaje fluvial de este rincón de Alborache.
La Ruta de los Molinos es fácilmente transitable para todo tipo de personas a pie, en bicicleta o incluso a caballo.
Además de acondicionar el recorrido cuenta con algunos paneles que informan sobre los antiguos molinos que encontramos a nuestro paso y sobre algunas de las construcciones realizadas para el aprovechamiento del agua.
Gastronomía mediterránea de interior: arroz al horno, gazpachos de pastor, paella valenciana, mojete, carnes asadas a la brasa con ajoaceite y, por supuesto, excelentes vinos de la tierra.
La Ruta Urbana nos permite un agradable recorrido por las calles de Alborache, un paseo en el que descubrir la Casa del Milagro, la Iglesia Santiago Apóstol, la Fuente de la Agricultura, el Parque San Jaime, la Plaza de España o el Torreón.
Desde algunos de estos puntos podremos enlazar con los senderos de corto recorrido.
Parque San Jaime, 8, Alborache
Merendero San Jaime
Parque San Jaime, 8, Alborache
Albergue Rural Actio
Partida Malenas, s/n, Alborache
Apartamentos Rurales Alborache
Camino Macastre, 2, Alborache
Casa Rural Molino Galán
Partida del Molino Galán S/N , Alborache